Desde que a mí chico le detectaron que es intolerante al gluten buscamos otras formas de rebozar el pescado…
Asi que usamos harina de garbanzos para ello, que aunque de sabor no queda tan rico como con la harina de trigo, es más nutritivo, así que genial. Y para hacerlas solo necesitas:
- pescado fresco: merluza o bacalao
- 1/2 cebolla dulce
- 2-3 dientes de ajo
- un poco de perejil fresco picado (unas 1 cucharadas)
- zumo de 1/2 limón
- 1 botellín de cerveza (sin alcohol y sin gluten)
- 1/2 cucharadita de nuestra mezcla de cúrcuma con pimienta
- un poco de sal rosa del Himalaya
- harina de garbanzos
- aceite para freír
Ponemos la cebolla, los dientes de ajo, el perejil, el zumo de limón, la cerveza, la cúrcuma con pimienta y la sal rosa en un recipiente y lo trituramos muy bien con la batidora de mano.
Después, pasamos la mezcla a un recipiente grande, como una bandeja de horno, y vamos añadiendo la harina de garbanzos poco a poco sin dejar de batir hasta conseguir una textura adecuada, ni muy líquida ni muy espesa. Dejamos reposar.
Por último, rebozamos el pescado en la mezcla y lo freímos en abudante aceite de oliva caliente, ¡listo!
Y a mí me gusta regarlo con zumo de limón, pero es muy típico comerlo con mayonesa o alioli.
¿Te animas a prepararlo? ¡Cuéntamelo en comentarios y por Instagram!
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